Cuando nosotros notamos las consecuencias es por que allí son extremas.
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| Andoni Canela |
Hemos entrevistado a Andoni Canela, uno de los fotógrafos más prestigiosos de nuestro país. Con trabajos publicados en el National Geographic, La Vanguardia, El País, Newsweek, Time, Wildlife, o New York Times, Andoni refleja la biodiversidad y la naturaleza de los cinco continentes en sus imágenes.
Reconocido con el Premio Godó de Fotoperiodismo en el año 2009, más de 50 exposiciones y numerosos libros publicados avalan una trayectoria reflejo de una vocación muy temprana.
Su último trabajo le ha llevado por Alaska, Canadá, Groenlandia, Islandia, Noruega, Rusia y Laponia en unas doce ocasiones durante los últimos cuatro años, de estos viajes nos presenta la exposición El Ártico se Rompe (CosmoCaixa, Fundación La Caixa)
El Ártico, el techo del planeta y a la vez el ecosistema más frágil y singular. Hablamos de la vida allí, las costumbres y dureza de un mundo tan gélido. Hemos visto glaciares y contemplado auroras boreales, todo ello en un innovador y espectacular espacio itinerante que recorrerá el país en los próximos meses.
El Ártico se agrieta, tomemos consciencia de que la amenaza es real. Cuando nosotros percibimos las consecuencias, es porque allí son extremas.
El Ártico se agrieta, tomemos consciencia de que la amenaza es real. Cuando nosotros percibimos las consecuencias, es porque allí son extremas.
¿Cuál es la realidad del Ártico?
La que ha sido hasta ahora: un lugar extremo e inhóspito. Las condiciones son muy duras tanto para la gente que vive allí como para los animales, aunque con el tiempo se han ido adaptando.
Lo que está ocurriendo, no hay ninguna duda, es que el calentamiento global está suponiendo cambios fuertes. Estos cambios afectan tanto a los animales como a las personas. Los animales ya no pueden estar en las mismas zonas que antes. El riesgo es muy grande para todos ellos.
¿Tiene freno esta realidad?
Esos cambios van a ir creciendo porque continúa el cambio climático. Otras consecuencias del deshielo pueden ser nuevas rutas marítimas, y con ellas las consecuentes extracciones de gas y petróleo. Hechos que eran imposibles hasta ahora.
Hay que pensar en lo que esto puede afectar al entorno y su gente. Tendría que haber un tratado similar al del Antártico, en el que existe una zona libre de intereses económicos y se orientan los esfuerzos hacia la investigación. Si no ocurre eso, irá a más.
Esto es lo que ocurre en el Ártico, ¿Cómo nos afecta a nosotros?
Lo que pasa allí es una consecuencia del clima. El deshielo de los glaciares enfría el agua con sus efectos, lo que pasa es que allí se nota antes, pero llega aquí también. En cuanto al clima la Tierra esta toda ligada.
¿Cuánto tiempo ha llevado el montaje de la exposición «El Ártico se rompe»?
Ha sido un trabajo de dos años de montaje de la exposición y de seis años de viajes. Hay dos partes en la exposición, la primera concierne a contenidos audiovisuales, de los que soy responsable, son videos y fotografías; y la segunda son una serie de multimedias e interactivos junto a utensilios, ropa y artesanía de los pobladores inuit que he traído de los viajes.
En cuanto al montaje ―el camión y organización de la exposición― hemos estado casi dos años.
En cuanto al montaje ―el camión y organización de la exposición― hemos estado casi dos años.
¿Cuál es la suma de viajes al Ártico en total?
Habrán sido unos doce. Cuento con los primeros en los que obtuve material diverso y los cuatro últimos expresos para la exposición.
Un proyecto de esta envergadura podríamos decir que es casi imposible sin una entidad que lo financie detrás, en este caso ha sido la Obra Social de la Caixa ¿Cómo ha sido la relación durante el recorrido.
Sí, claro. En este caso la producción, tanto por el espacio expositivo, el camión, como toda la producción interior es bastante costosa. Cuando propuse la idea a la Obra Social trabajamos en equipo, ellos respetan mi trabajo e ideas. Creo que ponemos cada uno de nuestra parte, así que ha sido un buen trabajo.
La exposición es itinerante y viajará por toda España. ¿Harás la ruta con ella también?
No podré estar en todas, pero intentaré ir a algunas. Ha estado en Santander, Girona, y viajará al País Vasco, Toledo, Ibiza, Castellón… Siete años intensos de ruta.
Son más de veinte años de viajes y experiencias en tu trayectoria profesional, ¿Has hecho la lista de todos los destinos en los que has estado?
¡Uf! En un par de ocasiones lo he intentado y me he parado a contarlos, pero es imposible, no lo sé. No sé cuantos llevo.
¿Te acuerdas del primer destino en el que sacaste imágenes para un trabajo?
Sí, pero ¿cuál llamaría yo el primer destino?… yo diría que fue Jamaica. De allí salieron alunas imágenes interesantes.
¿Y cuál es el viaje del que guardas un recuerdo especial?
Creo que fueron muy emocionantes los viajes a África. Fueron los primeros que hice, recuerdo que fue a Malaui Zimbabwe y Botsuana. Pero de esto hace muchos años. También recuerdo especialmente los viajes a Madagascar.
Trabajas en plena naturaleza, y en numerosas ocasiones en terreno inhóspito o rodeado de animales salvajes, ¿Has temido por tu vida en alguna ocasión?
No, en general no. (Piensa durante unos minutos) En alguna ocasión ha habido un breve instante… pero no, no he temido por mi vida. Por los animales quizá en algún momento muy puntual si alguno se acerca un poco más de la cuenta, pero por lo general no.
Quizá puedes tener un momento crítico si piensas en si tienes un accidente y vas solo. Algo tan simple como resbalarte en una zona de montaña o de hielo y acabar dándote un golpe, entonces piensas en si no te encuentran, o incluso, si ya no lo cuentas.
Para fotografiar al lobo, el oso o el lince te ocultas durante horas en una especie de tienda de campaña, ¿cómo pasan las horas dentro de este hide?
Vas mentalizado de que van a ser varios días así y que lo que buscas es difícil que ocurra, pero tienes que estar preparado pensando en que en cualquier momento puede pasar. Entro antes de que se haga de día y salgo al anochecer para no perturbar a los animales y para que no me perciban.
Has fotografiado en numerosas ocasiones auroras boreales y los volcanes, ¿Qué tienen de especial para ti?
Las auroras boreales cuando están especialmente activas es algo que hay que ver. Realmente los videos o las imágenes que se toman se quedan muy cortos.
Hay tantos tipos de auroras boreales como movimientos, intensidades o colores, es imposible que una sea igual a otra, este es su atractivo. Muchas están bien, pero cuando estas frente a una Aurora Boreal que cubre casi todo el cielo con intensidad y color es muy especial, no sabría cómo explicarte. Hay que verlas.
En cuanto a los volcanes son la fuerza de la naturaleza más primigenia y más lógica, también. Es emocionante la expulsión de la lava porque puede crear imágenes y sensaciones realmente fuertes. La creación de la tierra viene de allí, así que ver un volcán en erupción es la sensación de ver algo que se está generando de nuevo.
¿Y África?, ¿qué tiene el desierto?
He ido a bastantes desiertos, el de Kalahari, el de Namib que es el más antiguo, el desierto del Sahara, el de Atacama que es el más seco y aun así me falta el desierto del Gobi, pero algún día iré, seguro. Las imágenes en el desierto son especiales. Me gustan.
¿Cómo es la cámara que usas?
Llevo una cámara normal, una profesional de Canon de alta gama, una 5d. Lo que si llevo es un teleobjetivo y, depende luego de lo que vaya a fotografiar, si son paisajes o personas, un objetivo normal o un gran angular de 20mm. Cuando tengo que fotografiar animales que están lejos de mi posición utilizo un teleobjetivo de 600, este ya es una pieza importante que debe de pesar unos siete quilos aproximadamente pero es lo único que se puede usar para fotografiar a distancias de 100 a 300 metros.
Además de la cámara, ¿qué más llevas en la mochila?
(Sonríe) A parte del equipo fotográfico, algo de ropa, no mucha; un neceser mínimo y algún jersey. Depende de donde vaya, si hace frío o llueve, una chaqueta para cubrirme. También llevo algún que otro libro, la verdad es que leo más en los viajes que cuando estoy en el día a día o en casa.
Has pasado frío y calor, ¿cómo se llevan las inclemencias del tiempo?
Intentas estar preparado. Tratas de informarte antes del tiempo porque en el fondo influye mucho en todo tu trabajo. Piensa que es muy importante la luz si hay que fotografiar algún paisaje, o el tiempo en el caso de que quieras acceder a animales.
Y en cuanto a la comida, ¿cómo te organizas?
Normalmente la comida suelo hacerla en el campo, y la cena donde me toque volver, en ocasiones es en hoteles, pero intento buscar cosas raras, algún refugio, la tienda… sobrevivo. (Sonríe)
¿Te suelen abrir los hogareños las puertas de sus casas?
(Con inmediatez y satisfacción) Sí, depende de lo que vayas a hacer, pero sí. Por suerte en muchos sitios ocurre eso. Ya llevas tiempo preparando el viaje y contactando con gente del lugar, así que luego es fácil y por supuesto de este modo lo vives más intenso.
¿Cuál es el animal más difícil de fotografiar?
Te diría que más que de fotografiar, los animales son difíciles de ver. Para mí el lobo. Fotografiar al lobo es difícil, sí. No se deja ver.
¿Cuándo empezó tu pasión por la fotografía?
Empecé de muy joven, cuando noté que me gustaba la naturaleza y estar en el campo o en el monte; entonces me planteé hacer algo que me gustase y que estuviese relacionado con ello. Por otro lado me gustaba escribir y viajar. Así que lo junté todo.
Te hablo que entonces tendría 17 o 18 años, así que decidí estudiar algo que me permitiera ambas pasiones. Hice periodismo, ciencias de la información, siempre pensando en la intención de viajar y poder hacer fotos vinculadas a la naturaleza, ya fuera de lugares o animales.
Entonces dime, ¿Cuál es la fotografía perfecta? ¿Qué debe tener?
Luz. Acción o calma. Emoción, que te emociona al hacerla, al verla y cuando la miran los demás. Y que estéticamente tenga equilibrio, algo difícil de definir.
Entonces dime, ¿Cuál es la fotografía perfecta? ¿Qué debe tener?
Luz. Acción o calma. Emoción, que te emociona al hacerla, al verla y cuando la miran los demás. Y que estéticamente tenga equilibrio, algo difícil de definir.
¿Lo mejor de tu trabajo es?
Lo mejor es… (Pensativo) Muchas veces me lo planteo. En ocasiones estás en lugares y en momentos en los que solo la oportunidad de ver, oler y escuchar el entorno ya tiene una gran recompensa; y si encima en esos momentos ocurren cosas como pueden ser una aurora boreal o ver un águila que pasa frente a ti, entonces son momentos realmente especiales. Lo mejor son las sensaciones.
¿Podrías nombrar algún compañero de profesión al que admires?
Sí. A nivel internacional te mencionaré a Michael Nichols, es norteamericano, o Tom Malgensen, ambos hacen una fotografía de fauna y especies amenazadas. También me gusta mucho el trabajo de Peter Beard, que tiene una vertiente más personal y artística.
¿Cuál va a ser el próximo proyecto?
Bueno, ya está prácticamente decidido, aunque faltan detalles. En breve podré contar algo más, lo que puedo decir es que es un proyecto que hace mucho tiempo que tengo en mente y que por fin podré realizar, será intenso, me ocupara varios meses, pero será una experiencia extraordinaria.
Sé que voy a disfrutar con este proyecto, es arriesgado y ambicioso, pero solido y potente. Un vez esté inmerso en él intentaré hacer un seguimiento con crónicas, fotos y vídeos.
Sé que voy a disfrutar con este proyecto, es arriesgado y ambicioso, pero solido y potente. Un vez esté inmerso en él intentaré hacer un seguimiento con crónicas, fotos y vídeos.
¿Cuándo nos podrás contar más?
Espero que a finales de agosto pueda hacerlo público ya.
Espero que a finales de agosto pueda hacerlo público ya.
¿Y cuándo tienes previsto iniciarlo?
A final de este verano. Veremos, porque en esta ocasión se involucra bastante la familia.
A final de este verano. Veremos, porque en esta ocasión se involucra bastante la familia.
¿Y cómo lo están viviendo los pequeños?
Ellos encantados. ¡Imagínate! A Unai le apasiona participar en mis proyectos, y Amaia es pequeña aún.
Pues ayer cenando con unos amigos de la facultad. Algunos hacía mucho tiempo con los que no coincidía, incluso años, así que fue ayer mientras nos contábamos historias que nos estuvimos riendo un rato.
Una virtud y un defecto
Como virtud te diría que si me pongo en algo, le pongo empeño en hacerlo hasta el final. ¿El defecto? ¡Pues muchos! … Soy broncas, desordenado y seguramente algo mandón e impuntual a veces. Como ves, hay cosas.
¿Qué no repetirías?
Lo que está hecho, hecho está. No me arrepiento.
¿Y qué repetirías?
Muchas cosas. Y muchas de la misma forma, seguro.
¿Qué es lo que tienes pendiente por hacer desde hace años y nunca consigues?
Intento pensar siempre en lo próximo que voy a hacer, así intento motivarme. Así que lo próximo que voy a hacer es este proyecto que te contaba de viajar más de un año por el mundo. Quizá es esto. Ahora estoy centrado en ello.
¿El animal con el que te identificarías? ¿Y por qué? Con varios; es lo que tiene estar muy a menudo rodeado de ellos. A veces te sientes un lince. Otras un águila o un lobo solitario. También algunos días me gustaría transformarme en un leopardo de las nieves para caminar por las montañas del Himalaya.
Un destino.
Un destino.
Como base para vivir siempre, es una cosa; pero como destino de mis viajes te diría las montañas Rocosas que va a ser el próximo destino.
Mar o montaña.
Montaña y mar. Aunque me tira más la montaña, el mar también me atrae. He tenido experiencias bastante fuertes en mares tropicales, en mares fríos, no tanto en el Mediterráneo. Pero por otro lado suelo estar más en la montaña, tanto por el trabajo como en lo personal.
Un libro.
LaPatagonia, de Bruce Chatwin. Es una crónica de un viaje por la Patagonia, algo muy personal.
Un hotel para recomendar.
No tengo un hotel en particular, pero sí tengo muchos hotelitos por el mundo de los que no recuerdo el nombre.
¡Espera!, te voy a decir uno: la Posada del Sol, en la Isla de Guanaja, Honduras, en el Caribe. Es especial.
Un restaurante
Donde comí ostras por primera vez. Fue en una isla llamada Nosy Komba en Madagascar. ¡Qué recuerdo!
Una imagen.
Pues esa imagen comiéndome las ostras en aquella playa de arena blanca. De esto hace ya veinte años, podía haber sido ayer, o podía ser mañana.
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| Andoni Canela y Sandra Blasco en la exposición El Ártico se rompe (Fundación La Caixa) |
LIBROS PUBLICADOS
1998. Catalunya. Una Mirada (Ediciones Pau)
2007. Aether. La esencia de los cuatro elementos (Editorial Mediterrànea)
2008. Un viaje soñado (Biplano)
2008. El oso cantábrico (Caja Madrid/FOP)
2009. La Mirada Salvaje (Ediciones Blume)
2010. La huella de Félix (Editorial Grijalbo)
2011. Parcs naturals pas a pas. Xarxa de parcs naturals de la Diputació de Barcelona (Diputació de Barcelona)
2012. El Águila Imperial Ibérica. (Fundación BBVA y Fundación Amigos del Águila Imperial)
2013. Looking for fochas (PAU Education)
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DATOS DE INTERÉS
Web: AndoniCanela
Exposición: El Ártico se rompe
Entrevista: Sandra Blasco -- Fotos cedidas por Andoni Canela
Agosto 2013
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